Soy María Luisa, vivo en Málaga y vengo de Valera, en Venezuela. Allí trabajaba como jueza en la parte penal y ya estaba pidiendo mi jubilación especial cuando por cuestiones de calidad de vida y de la salud de mi niña, que tiene una condición, tuve que salir. Yo sentía que mi vida ya estaba resuelta, pero en diciembre de 2018 tuve que tomar la decisión de irme. No fue fácil, pero o tomas una decisión o te sigues quejando.

Es muy duro estar lejos de tu tierra, pero me he sentido bien porque me he tropezado con gente muy buena. Además, mi hija está muy feliz y eso me anima a estar aquí. Desde que llegué me sentí plena aquí, me siento bien, extraño a mi familia, pero siento que pertenezco, al menos que no desencajo y eso te ayuda.

''Cada uno tiene una historia y emigra por diferentes causas. Tomar una decisión de dejar tus comodidades, si las tenías, y tu familia es una decisión muy fuerte''.

Cada uno tiene una historia y emigra por diferentes causas. Tomar una decisión de dejar tus comodidades, si las tenías, y tu familia es una decisión muy fuerte. Quitarte el chip de que la gente no se va a adaptar a ti, sino tú al nuevo país cuesta mucho y hasta que no lo viví no entendí. Entre la universidad y mi niña me he adaptado al cambio de palabras, costumbres, comida…

Lo que más me gusta de vivir en Andalucía es la gente, hay gente muy noble, siento que coinciden mucho con cómo fui criada. Me sorprendió que respetan mucho las tradiciones, la Semana Santa me parece espectacular. Esta experiencia la resumiría en “agradecimiento, perseverancia y felicidad” porque si mi niña está feliz, entonces yo estoy feliz, a pesar de que de repente te ataca la nostalgia, pero no es perenne.

Esta historia de vida forma parte de la primera fase de la campaña de sensibilización ''Soy Migrante''.

SDG 4 - EDUCACIÓN DE CALIDAD
SDG 10 - REDUCCIÓN DE LAS DESIGUALDADES
SDG 16 - PAZ, JUSTICIA E INSTITUCIONES SÓLIDAS
SDG 17 - ALIANZA PARA LOGRAR LOS OBJETIVOS