Ginebra – La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) se hace eco del llamamiento formulado por el Secretario General de las Naciones Unidas Antonio Guterres en favor de un cese al fuego humanitario, inmediato y duradero, para permitir que la asistencia crucial pueda llegar a quienes más la necesitan en la Franja de Gaza. La OIM también comparte las graves preocupaciones manifestadas por funcionarios de las Naciones Unidas con relación a que los trabajos humanitarios en Gaza están al borde del colapso por los intensos enfrentamientos y la falta de acceso.

El serio riesgo de colapso del sistema humanitario en Gaza ha llevado a que el Secretario General de la ONU Guterres invoque el Artículo 99 de la Carta Constitutiva de Naciones Unidas de acuerdo con el cual se urge al Consejo de Seguridad de la Organización para que ayude a evitar una catástrofe humanitaria y haga un llamamiento para que se declare de inmediato un alto el fuego humanitario.

“El nivel del desplazamiento en Gaza es masivo; las condiciones humanitarias son profundamente alarmantes y están al borde del colapso”, declaró la Directora General de la OIM Amy Pope. “Se necesita un alto al fuego inmediato para poder proceder a la entrega adecuada de agua potable, alimentos, otros elementos esenciales para salvar vidas y aliviar el tremendo padecimiento de la población civil”.

La OIM está sumamente consternada por el masivo desplazamiento de civiles en Gaza y alarmada porque se han reportado más evacuaciones hacia áreas que ya estaban muy congestionadas.

La OIM hace un llamamiento a todas las partes para que se respete la legislación internacional humanitaria y de derechos humanos y para que se tomen todas las medidas precautorias posibles para evitar el daño a civiles y salvaguardar la infraestructura civil.    

Las personas de Gaza deben tener acceso inmediato a albergues seguros, cuidados médicos, alimentos, instalaciones para la higiene y el saneamiento y para garantizar que las familias no sean separadas. Los civiles y los trabajadores humanitarios deben ser protegidos.

La OIM junto a otras agencias de Naciones Unidas hacen un llamamiento conjunto para proteger a la población civil, tanto la palestina como la israelita, de sufrir algún daño mayor, para pedir la liberación de los rehenes retenidos en Gaza y la cesación inmediata de ataques indiscriminados de ambas partes.

Se estima que 1,9 millones de personas están desplazadas en Gaza (aproximadamente un 85% de la población) sin poder paliar sus necesidades básicas como las de alimentos, agua, albergue digno e instalaciones de saneamiento además de cuidados médicos.